Una Institución Modelo… Pulso del País
La trayectoria del Banco Popular arriba a su 50 aniversario, con una larga e influyente estela de compromiso y liderazgo. Creciendo con el mismo pulso de la nación dominicana, el Banco Popular ha tenido un protagonismo extraordinario en términos de la imagen de confianza y sostenibilidad bancaria que hoy percibe todo ahorrante dominicano por su peso constante y sonante. Todos los sectores productivos del país, reconocen que el crecimiento de la economía dominicana en el cuso de su vida libertaria, se debe en gran proporción al rol jugado por el Banco Popular, obtenido su fortaleza al ofrecer una copiosa gama de servicios, innovaciones crediticias, productos nuevos y abundantes sucursales prácticamente por todos los rincones del país. Vigorosamente ligado al crecimiento del sector automotriz, el Popular ha sido un motor de ese mercado de muchas formas, donde la AutoFeria Popular, por ejemplo, es el más visible y contundente de todos sus aportes al sector.
El Hito Popular
El Popular ostenta los laureles de haber abierto las puertas al crédito masivo, ya que hace 50 años todo aquél que tenía un proyecto de inversión no necesariamente tenía acceso a recursos frescos para su emprendurismo. Así nació este paradigma de la nación dominicana y orgullo genuinamente nuestro, que a su larga lista de encomios que han trillado la vida del Popular desde sus comienzos, al despertar de la República a la vida democrática, en el 2012 suma el reconocimiento a los mejores bancos de Latinoamérica por la revista Global Finance, en virtud de sus “resultados sobresalientes, el crecimiento de sus activos, la rentabilidad, las relaciones estratégicas, el servicio al cliente, los precios competitivos y la cartera de productos innovadores de las distintas entidades financieras”.
Su última presea la recibe a finales del 2013, al haber sido galardonado como el banco del año de la República Dominicana, por parte de la revista The Banker, de la firma editorial británica Financial Times.
Este importantísimo logro ha sido alcanzado por el Popular en otras diez ocasiones previas, en virtud de sus compromiso con el desarrollo de las pequeñas y medianas empresas, sus iniciativas tecnológicas de alto impacto, como es el caso de la primera tarjeta de débito con chip del mercado, su página de Internet Banking o la aplicación App Popular para móviles inteligentes, entre otros logros.
Propulsor de la Macro, mediana y Microempresa.
Debe decirse que el Banco Popular ha sido y sigue siendo un formidable impulsor de las macro, mediana y la micro empresa, que gracias a su transparente manejo financiero, ha impulsado el crecimiento de la productividad y al mismo tiempo ha contribuido con el Banco Central a la estabilidad económica y, por vía de consecuencia, a mantener la estabilidad de la moneda local, continuar ayudando con el desarrollo del país y a cada dominicano en particular.
Uno de los Mejores Bancos del Continente
Hoy, tras sus 50 años luce más firme y fuerte que nunca, dueño de una institucionalidad monolítica, comparable a la de los grandes bancos del planeta. De hecho, dado su encomiable desempeño empresarial, el Banco Popular Dominicano forma parte de este club de las entidades financieras latinoamericanas más reputadas, junto a grandes actores de habla hispana como son el Grupo Santander, BBVA, Itaú o Banamex, entre otros.
Un Gran Visionario: Don Alejandro Grullón
El prominente empresario que fundó esta institución ejemplar, es también un gran referente del emprendurismo exitoso, cuando hace medio siglo sembró con más visión que con capital, las firmes bases de esta institución, literalmente una escuela bancaria que ha dejado un legado incuantificable en el sector bancario nacional, en tiempos en que bancos extranjeros de alta capacidad operacional dominaban todo el horizonte.
Una Historia Ceñida por el Éxito
5 décadas atrás, al de salir de Santiago hacia la Capital en busca del progreso con su proyecto bancario bajo el brazo, Don Alejandro Grullón jamás se imaginaría que gracias a su trabajo tesonero algún día sería nombrado “Padre de la Banca Dominicana”, no sólo por ser el creador del Banco Popular Dominicano, el Grupo Financiero Popular, como el importante holding compuesto por empresas de actividades de la multibanca, negocios de tarjetas de crédito, bienes raíces, reaseguros y banca internacional extendida a Puerto Rico, Panamá, Nueva York, Grand Cayman y Haití, así como compañías de inversión, tenedora de acciones de empresas de servicios, financiamiento de viviendas y transferencia de dólares, sino también en su papel de participante, a través de la Asociación para el Desarrollo, Inc.
(APEDI) en la fundación de la Asociación Cibao de Ahorros y Préstamos para la Vivienda y la Compañía Financiera para el Desarrollo, entre otras entidades.
Alentado por sus ímpetus de juventud, el joven Alejandro siempre fue un visionario atípico, que creía en la inversión local, el ahorro, el préstamo y la capacidad de soñar de muchos dominicanos a niveles casi inauditos, factores que lo hicieron crecer vertiginosamente al lado de una generación de soñadores que, como él, proyectaban inéditos planes mentales en concretas realidades empresariales, que han crecido paralelamente al auge sostenido del Popular.
Apoyando grandes reformas en materia agrícola, forestal, industrial, maderera y de productos plásticos; explotación petrolera, proyectos educativos, sociales y culturales, investigaciones arqueológicas, turismo y desarrollo comunitario, Alejandro Grullón está templado bajo el canon del empresario clásico, disciplinado, cauto por naturaleza, pero al mismo tiempo visionario como pocos en el país.
Haber sido presidente del Plan Sierra lo ha marcado como uno de sus mayores logros. Impulsor y promotor de tan ambicioso proyecto ecológico, que junto al obispo emérito Monseñor Roque Adames y representantes de la sociedad civil e instituciones públicas del sector agua y recursos forestales, desde sus inicios procuró mejorar la Cordillera Central, como una de sus prioridades más señeras, su añorado refugio de la infancia, en vista de que la cobertura de suelo había sido degradada a un 22%, noble preocupación que aún hoy muchos carecen de esa sensibilidad. Gracias al trabajo realizado por este imbatible motor del Cibao, la situación ha evolucionado y el terreno está razonablemente reforestado.
Culto a la Institucionalidad
Lograr que un dominicano que cuidaba de sus ahorros de toda una vida creyera en un banco formado por dominicanos fue un logro indisputable del Popular, cuya historia limpia y de buenas prácticas financieras nunca ha dado un mal ejemplo de turbulencia interna. Férreas normas administrativas y un culto irrestricto a la institucionalidad son los pilares del Popular.
Relevo Generacional de Don Alejandro
Heredando el mismo entusiasmo de Alejandro Grullón, pero forjado con la dinámica de las nuevas tecnologías, el ritmo de un Popular de vibrante actualidad electrónica es una consolidación llevada a cabo por Manuel A. Grullón, que en segunda generación se constituye en el relevo institucional del Banco con clara visión de futuro.
Incorporando cambios estructurales estratégicos, la batuta de Manuel A. Grullón ha mantenido al cliente en el centro de sus actividades de servicios y de negocios, tanto en el mercado local como internacional, fortaleciendo significativamente el desempeño organizacional, la gama de productos se ha multiplicado sin cesar, alineando las capacidades y experiencias del capital humano, para cumplir dinámicamente con sus planes de crecimiento como Grupo Financiero. Su cercanía con el público y la gran simpatía corporativa de que goza el Popular hoy en día, su rostro moderno, su mercadeo inteligente y su liderazgo creciente son méritos insoslayables de Don Manuel.
La AutoFeria Popular
La aprobación inmediata del crédito, las atractivas condiciones de financiamiento, el pago de cuotas a través de transferencias desde la cuenta del cliente del banco, los importantes descuentos en accesorios, el modelo viejo puesto como inicial del nuevo y el seguro full incluido en la transacción, son los principales logros de la AutoFeria Popular en sus casi 20 años de historia creciente y fecunda, líder de la banca en esta clase de eventos, el más esperado por la familia dominicana, por tratarse de una verdadera fiesta en la que miles hacen su sueño realidad justamente en la época más entrañable del año, la temporada navideña. Fruto de un gran líder, la AutoFeria es un triunfo organizacional, nacida de la boyante visión de futuro del Banco Popular, marcado por el camino de singularidades institucionales que han vestido desde siempre su crecimiento, sirviendo al país durante 50 años, como incansable motor de su progreso.
La más reciente edición de la Autoferia Popular es una ostensible prueba de ello, aglutinando este año a 30 grandes dealers, con RD$2,000 millones en préstamos aprobados, lo que representa un 50% más respecto a las ventas de la Autoferia Popular del año pasado, que en términos de unidades vendidas equivale a 1,600 nuevos propietarios, con el irresistible atractivo del Banco Popular de ofrecer las tasas fijas más bajas del mercado, de 7.50% fija a seis meses, 9.95% fija a un año, 11.95% fija a tres años y 12.95% fija a cinco años, un logro del Popular que ha provocado esta gran oleada de felices compradores.