Audi está girando sus cuatro aros a toda prisa en lo tocante a la conducción autónoma a velocidades elevadas. Su objetivo es anticiparse a condiciones extremas de conducción que todo vehículo pilotado deberá enfrentar en la vía pública, con el fin de mejorar la seguridad. Para tales fines, Audi ha seleccionado el «Thunderhill Raceway Park» en el norte de California, como un centro clave de prueba de Estados Unidos para la investigación de conducción pilotada avanzada.
Bajo una asociación de años, los ingenieros de Audi y el Laboratorio de Investigación Electrónica en Belmont, California, ahora utilizarán esta pista para estudiar cómo los vehículos de auto-conducción se comportan a nivel de la alta velocidad. De esta forma, los ingenieros van a entender cómo calibrar el software del vehículo y los sistemas avanzados de asistencia al conductor para manejar condiciones repentinas y extremas.
Audi ha declarado que planea introducir la tecnología de conducción altamente automatizado, llamada por ellos como la conducción pilotada, a ser montada en la nueva generación del Audi A8 en pocos años. Pero la investigación constante continuará como las capacidades de la tecnología mejoran rápidamente, permitiendo que el coche para manejar más de las funciones de conducción.