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En poco tiempo, el Audi R18 e-tron quattro estará reclamando su cuarta victoria consecutiva en las 24 Horas de Le Mans, con Audi compitiendo contra tres fabricantes. Al mismo tiempo, esta será una batalla de los conceptos: diesel vs. los motores de gasolina, frente cinética recuperación de energía térmica y electromecánico vs. electrostática almacenamiento electroquímico.
En junio de 2013, una batalla entre los conceptos híbridos dominó la carrera de las luces de la bandera por primera vez. Eventos antes de la carrera ya dieron una muestra de lo difícil que sería la confrontación. Funcionarios cambiaron repetidamente las regulaciones, en perjuicio de Audi. Los cambios realizados en la potencia del motor, la capacidad del depósito de combustible y la duración de las paradas en boxes producen constantemente nuevas ventajas para el retador Toyota.
«Estas decisiones tomadas por la comisión de carreras de resistencia fue una sorpresa para nosotros», dice Chris Reinke, Jefe de LMP de Audi Sport. «Las restricciones impuestas a los TDI de energía de la planta de Audi fueron difíciles. Objetivamente, que dieron lugar a la reversión de la experiencia de los conductores de todos los días están familiarizados, como la gama de nuestros autos de carreras TDI fueron repentinamente inferiores a los de nuestros opositores utilizando los motores de gasolina”. Como resultado, los espectadores vieron que Audi lo general tenía que entrar en boxes para repostar dos vueltas antes. Loïc Duval, Allan McNish y Tom Kristensen en el victorioso Audi se dirigieron a los pits 34 veces en toda la distancia de carrera. El Toyota perseguidor requiere sólo 30 paradas de repostaje.
La lluvia puso incertidumbre adicional, al igual que el total de once períodos siguientes de precaución . Pero los pilotos de Audi mantuvieron la cabeza fría incluso con lluvia fuerte en la etapa final de la carrera, condujeron rápido e impecable y vieron la bandera a cuadros alzarse con su duodécima victoria de Le Mans con una ventaja de una vuelta sobre el mejor Toyota.
