Una decena de equipos de estudiantes se enfrentan en la “Audi Autonomous Driving Cup” o “Copa Autónoma de conducción Audi” para elegir la mákina Audi mejor pilotada, con 10 mil euros de recompensa para el primer lugar. La Copa está dirigida principalmente a estudiantes de ciencias de la computación, ingeniería eléctrica e ingeniería mecánica, aglutinados en diez equipos en un aguerrido e intenso ‘face to face’ a lo público en el ‘Audi Museum Mobile’.
«Nuestro competencia será un exigente campo de pruebas para el software de los jóvenes expertos. Tráfico en dirección contraria, situaciones difíciles de aparcamiento y los obstáculos que surgen de repente pondrá a prueba las habilidades de los contendientes”, dijo Björn Giesler, uno de los organizadores del certamen.
Un motor eléctrico acelera los vehículos hasta 40 km por hora (24.9 mph). Los estudiantes cuentan con un paquete de software básico para la competencia, de la que desarrollan su propia arquitectura de software para procesar los datos de los sensores e interpretar situaciones y controlar el auto en consecuencia. El desafío de los estudiantes es completar una ruta lo más rápidamente posible con el menor número de errores. Los puntos se deducen de los accidentes, el tiempo perdido y ejecución imprecisa.
El parecido entre los autos modelos y sus contrapartes de tamaño completo es algo más que visual: El entorno de desarrollo para el software es el mismo exacto utilizado para probar los sistemas de asistencia al conductor. Según Giesler, algunos de los retos son de hecho muy similares a los encontrados con los automóviles en el desarrollo de la producción. «Los sensores de medición en los modelos tienen que trabajar con la misma precisión que los de sus hermanos mayores”.