El Land Rover Discovery Sport literalmente paró el tráfico, mientras remolcaba tres vagones de tren que pesan 108 toneladas, en una demostración de su infatigable capacidad de remolque y más aún: hacer una dramática exhibición de su tecnología de conducción semi-autónoma.
Arrastrar 108 toneladas, equivalente al peso de un avión Boeing 757, es una demostración contundente llevada a cabo por la Land Rover Discovery Sport, sobre un puente a 85 pies del suelo, gracias al empuje de su motor diésel Ingenium con 180 Hp, que proporciona 430 nm de torque.
Aunque el Discovery Sport está hecho para remolcar 2,500 kg (2,5 toneladas), fue capaz de tirar 60 veces su propio peso sin problemas. Además, el Discovery Sport se benefició de la cartera de tecnologías que posee como Terrain Response, Tow Assist, Tow Hitch Assist and All Terrain Progress Control, que es un sistema semi-autónomo para la conducción off-road.