El conglomerado industrial que posee General Motors en Sao Paulo, Brasil, tendrá una planta más de producción, sumando así 9 en total, y estará destinada a la fabricación de un nuevo vehículo para el segmento de alto volumen de ventas.
Con una inversión de 1,200 millones de dólares, la nueva fábrica es producto de un acuerdo con los sindicatos y deberá emplear a 2,500 trabajadores en tres turnos de producción. Las actuales ocho plantas cuentan con 6,500 empleados, y una de ellas posiblemente se vea afectada por cierre después de que la producción de algunos vehículos antiguos fueron reemplazados por nuevos modelos realizados en otras unidades de GM en Brasil.