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La tecnología del guante robótico desarrollado por General Motors y la NASA, (conocida como el RoboGlove), y que es usado en la Estación Espacial Internacional, ahora se implementará en el cuidado de la salud, manufactura y otras aplicaciones para la gente común, gracias a un join venture entre GM y Bioservo Technologies AB, una empresa sueca de medicamentos.
El RoboGlove utiliza tecnología de vanguardia, con sensores que son comparables a los nervios, músculos y tendones de una mano humana. Uno de los requisitos de diseño para el RoboGlove fue diseñarlo para operar herramientas, logrando una destreza manual sin precedentes.
Bioservo inicialmente desarrollará un nuevo dispositivo de asistencia para uso industrial que podría aumentar la eficiencia y reducir la fatiga en los músculos de la mano. La investigación muestra que la fatiga puede ocurrir al cabo de unos pocos minutos de estar continuamente manipulando herramientas.
«Combinando lo mejor de tres mundos, la tecnología espacial de la NASA, la ingeniería de GM y de tecnología médica de Bioservo en un nuevo guante industrial, podría conducir a un uso industrial a gran escala de esta tecnología«, dijo Tomas Ward, director general de Tecnologías Bioservo. Ward, describe la combinación de la tecnología como un paso importante hacia la introducción de la tecnología de exoesqueleto suave a nivel mundial.
