La Hyundai Santa Fe nació con aureola. Rápidamente conquistó sus entusiastas y amarró un gran nicho desde su lanzamiento en el 2001. La gala que esta mákina ha hecho en nuestro mercado ha determinado la simpatía de marca, y hoy es una consolidada que extiende sus brazos hacia el futuro con este modelo de tercera generación, en el que todo cambió, excepto el nombre.
El nuevo Hyundai Santa Fe ha sido moldeado estrenando un nuevo estilo visual denominado ‘Storm Edge’ como una evolución más contundente del Fluidic Sculpture aplicado generosamente en el Elantra y el Sonata. Consiste en mover cada trazo con suavidad, pero también con el carácter que le concede un aspecto enérgico, tal como lo hace la naturaleza en una tormenta, de allí la evocación del término Storm. Concomitantemente debemos enfatizar que Hyundai ha sido un abanderado de las líneas más futuristas de la industria, las cuales están presentes en todas sus mákinas, apropiadas de acuerdo a cada modelo, como yendo por sistema para abastecer sus exigencias de diseño con ese sello de actitud atrevida.
El resultado es un modelo copiosamente equilibrado, con mayor espacio interior para sus tripulantes, en lo que definitivamente fue una de las marcas más esperadas del estelar Salón del Automóvil de Nueva York. Para más robo de cámara, Hyundai ejecutó la doble ‘pirueta’ cautivando al auditorio con dos versiones: la Santa Fe Sport que ya ha sido presentada al mercado dominicano para seguir la línea del modelo actual y una versión un poco más larga que gana versatilidad con mayor espacio en el maletero, aún con la tercera fila de asientos levantados y que recibe ligeros detalles estéticos en el exterior, mákina que podríamos llamarle: la ‘Gran Santa Fe’. Este modelo estará disponible en nuestro mercado en el primer trimestre del 2013.
Pero el mayor impacto es que se trata de una Santa Fe más grandiosa en su imagen y en su otra dualidad: el donaire de vehículo urbano que no deja dudas de sus atributos de confort y su capacidad para salir del asfalto con una singular simetría dinámica.
Las nuevas facciones de la Santa Fe proporcionan un rostro muy emocionante, donde el juego de luces se presenta con gran tamaño y muy estilizado, con curvaturas estéticas, haciendo un rejuego de grandeza con la enfática parrilla que sugiere mucha fuerza. Un capó dominante y el amplio parabrisas, que en nada recuerdan a su predecesor; mientras que el diseño de la parte trasera es limpio e igualmente de grandes luces, afirmando que el tamaño sí importa. Todos estos trazos nos convencen del valor inspirador del concepto Storm Edge, pero lo mejor de su desarrollo se disfruta en su interior.
Si ya la actual generación introdujo importantes mejoras en una marca imparable, la nueva Santa Fe Sport nos lleva a un paso más adelante. En términos de trazos, el perímetro interior es atractivo en todos los detalles, con agradables empalmes de madera y aluminio. Todo el tablero domina la vista que, sin dudas, es la más formidable actualización de este todoterreno coreano. Nada parece mantenerse quieto, todo responde a un flujo que sugiere amplitud, que evoca dinamismo. De hecho, todo en esta mákina es más amplio, como igualmente lo es la capacidad del maletero que ahora se ha incrementado.
Entre el juego de líneas fluidas, los cilindros de los marcados principales están separados por un monitor de información activa a ‘full color’ y al centro del tablero se encuentra la una pantalla central táctil para el control de la música con reproductor CD-mp3, entradas auxiliares para iPod y puerto USB en la versión full. En este monitor también se proyecta la cámara de asistencia de reversa.
¿Qué hay en el motor del nuevo Hyundai que sea igualmente novedoso? Para comenzar es más potente que el actual, y viene a nuestro mercado con tres opciones mecánicas, repartidas entre dos de gasolina y una diésel. Quien busca el refinamiento se inclinará por un 2.4 litros de 176 hp. Si prefiere mayor poder, está el 3.3 litros que homologará casi 100 caballos más.
También está disponible entre las diferentes opciones de motor la tracción delantera o la tracción total, pero todas las Santa Fe Sport cuentan con la transmisión automática de seis velocidades.
Significativo es el peso total del nuevo Hyundai, con una dramática reducción de 266 libras por debajo del modelo 2012, un aporte que revitaliza la proverbial promesa de marca Hyundai. Todos los modelos cuentan con un sistema «Active ECO» que modifica el control del motor y la transmisión para suavizar la respuesta del acelerador e incrementar la economía de consumo.
La Santa Fe llegó a nuestro país hace 12 años y no ha cesado de captar adeptos. Al dominicano le agrada y está atento a sus modificaciones. De allí que sea tan esperada en el 2013, sobre todo por el debut de sus nuevas formas, avaladas por el nuevo ‘charm’ de la marca. Su capital de respeto lo forjó en esa exitosa primera década, en la que construyó su imagen de cero, pero como lo hizo bien, hoy es un hito de nuevo cuño. Ahora, con todo a su favor, de ella se espera mucho, y mucho se hablará de este protagonista destacado en el panorama SUV. Probará a los usuarios que Storm Edge cumple su misión y que, sobre todo, sigue siendo una insignia de 4 ruedas.