SEAT continúa apoyando el ingenio de los jóvenes talentos y por sexto año consecutivo patrocina la Fórmula Student Spain, una competición de tres días que se celebra en el circuito de Barcelona-Catalunya.
Para salir victoriosos en las diferentes categorías de la prueba, 1,700 alumnos de ingeniería, integrados en 68 equipos, han trabajado durante un año en el diseño, desarrollo y construcción de sus propios vehículos de carreras. En la competición se darán cita estudiantes de 13 países, principalmente de Alemania, España, Italia y el Reino Unido, quienes tratarán de convencer a un jurado que valorará principalmente la capacidad de innovación y la creatividad en el desarrollo de los monoplazas.
Este año, SEAT será una vez más el patrocinador principal del evento y aportará soporte técnico y la participación de ingenieros del Centro Técnico de la compañía, que ejercerán de jueces durante el certamen. La marca es, además, el patrocinador principal de dos equipos (ETSEIAT EcoRacing y ETSEIB Motorsport, ambos de la Universidad Politécnica de Catalunya) y entregará también dos premios para reconocer el equipo con la mejor innovación tecnológica y el campeón en la categoría de autos de combustión. Durante los cuatro días de competición, SEAT estará presente en el circuito mediante un stand en el que organizará distintas actividades y mostrará a los participantes los programas que destina a los estudiantes y las posibilidades de formar parte de la empresa.
El número de inscritos en la Fórmula Student Spain ha ido en aumento en los últimos años y en esta edición ha alcanzado la cifra récord de 1,700 participantes, 500 más que en 2014. Este dato confirma la buena forma en la que se encuentra la competición, una iniciativa que se puso en marcha en 1981 en Estados Unidos y que desde hace seis años se celebra en España. El reto para los participantes comienza mucho antes de que los monoplazas empiecen a rodar sobre los circuitos incluidos en el campeonato. Los jóvenes ingenieros, la mayoría en la fase final de su formación académica, tienen la oportunidad de aplicar sus ideas en todas las etapas de fabricación de un vehículo, desde el diseño a las opciones de conducción.
Para los estudiantes, el desarrollo de su mákina supone un auténtico reto profesional. Durante la competición los jueces someten a los vehículos presentados a diferentes análisis para evaluar la adecuación y originalidad del diseño, la calidad de la propuesta desde el punto de vista técnico, su respuesta durante pruebas dinámicas e incluso la viabilidad del proyecto en términos comerciales.