Johan de Nysschen, nuevo presidente de Cadillac, planea una expansión del personal de operación de la marca a Manhattan y podría ayudar a atraer talento adicional poniendo un poco de distancia – física y cultural – entre el equipo directivo de Cadillac y la sede de GM en Detroit. Si bien las funciones técnicas como diseño, ingeniería y desarrollo de productos, probablemente permanecerían en el sureste de Michigan, es posible que de Nysschen pudiera cambiar el marketing, la publicidad y la estrategia en Manhattan.
“A medida que crece Cadillac es posible que podamos expandirnos a otro Estado” dijo el portavoz de Cadillac, David Caldwell; afirma que General Motors trabaja en su renovación de imagen de marca y ampliación de su atractivo fuera de Norteamérica bajo el nuevo jefe Nysschen.
Nysschen, en su papel anterior como jefe de Infiniti, diseñó una reubicación de esa unidad de Yokohama, Japón, a Hong Kong, en parte para obsequiar su equipo más autonomía de la matriz japonesa y ampliar en los mercados globales.
“Cadillac, una de las marcas más antiguas del mundo, está fortaleciendo hoy su estado como una de las marcas de lujo del planeta”, señala Caldwell.