Frente el exigente reto de las 6 Horas de Spa, el Audi R18 e-tron quattro estrena configuración inéditas en su carrocería. Se diferencia significativamente de la versión Audi ganadora en la carrera del Campeonato del Mundo de Resistencia WEC en Silverstone, de la FIA.
Ene Monchaux, Jefe de Aerodinámica de Audi Sport, explica el fondo: “Se ha convertido en una tradición de Audi para desarrollar diferentes configuraciones de carrocería que estén perfectamente equipadas para la alta velocidad en el circuito de Le Mans, donde la velocidad media por vuelta superar los 240 km por hora”. Para fines comparativos, en la pista en Shanghai, programada para ser corrida en noviembre, los pilotos alcanzan un promedio de sólo 180 km por hora, o sea, hasta 25 por ciento menos velocidad.
Si bien los cambios visuales en años anteriores eran apenas reconocibles para el ojo inexperto, Audi ha seguido consistentemente un camino diferente desde 2013. «La larga cola era una característica distintiva eficaz para el público», dice Jan Monchaux. Junto con su equipo de desarrollo, desarrolló una versión de carrocería específicamente para las 24 Horas de Le Mans. Esta configuración acabado al ras con el ala trasera y, al mismo tiempo contenía muchas soluciones más detalladas. El objetivo: significativamente menor fricción al omitir la carga aerodinámica, con el fin de estar mejor equipado para velocidades más altas. Downforce es la fuerza que los componentes aerodinámicos crean. Se presiona el coche de carreras en el suelo y, como resultado, permite velocidad en las curvas superiores.