La llama olímpica nacida hace 2 mil años en Grecia, sede de los juegos de la antigüedad, continúa flameando vibrantemente, a horas de encender el pebetero de Rio 2016, como el máximo símbolo de la paz y la confraternidad humana a través del deporte olímpico.
Enarbolada la antorcha por Nissan, en su estatus de ser el patrocinador oficial de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos Río 2016, la marca se ha proyectado como la ‘primera firma olímpica’ del mundo. Nada se parece a la emoción de verla pasar por pueblos o ciudades, donde Nissan ha hecho historia con la maratónica ceremonia de transportar la antorcha con toda su gama de modelos totalmente nuevos, a lo largo de los más de 8 millones de km cuadrados del territorio brasileño.
Convertida en una inusitada experiencia mediática sobre ruedas, única en la industria automotriz, la antorcha parece simbolizar también una nueva llama del “Innovation That Excites”. Un tramo del recorrido correspondió a José Román, vicepresidente divisional de Ventas y Marketing de Nissan LATAM, así como María Eugenia Santiago, Directora de Comunicación Corporativa, uniéndose a la larga lista de personalidades empresariales, del deporte, del espectáculo, del gobierno de Brasil y de la iniciativa privada, que han tenido el privilegio de portar la antorcha en segmentos vivamente selectos.
El Estadio Jornalista Mário Filho, más conocido como estadio Maracaná, aguarda por la llama de la justa este 5 de agosto, donde Nissan está contribuyendo al sueño de la paz universal, representado por la antorcha, en una vivaz realidad que une culturas, razas y credos.