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Citroën equivale a un salto continuo en la industria. Su tendencia de irun paso adelante ha aportado numerosos avances como pionero reincidente. De manera especial, Citroën destella la chispa viva de sus innovaciones en diseños extraordinarios. Se trata de una de las marcas que rompen esquemas y exhiben una imagen en constante evolución, que por su refinada expresión abre compuertas de futuro. El C3, por tanto, lleva en sus genes auténtica sangre Citroën, respondiendo entusiastamente al legado innovador de la marca. Pero también, Citroën es un nombre que se escribe con tinta de gloria en las grandes competiciones mundiales, como el World Rally Championship, donde el C3 es el nuevo representante de esa casta triunfadora de los chevrones.
El Citroën C3 encanta por su tentadora volumetría que surge desde su frontal de talle alto, que expresa equilibrio y fluidez bajo un trato muy enérgico y cromático que lo separan del resto de la categoría. Su parrilla de chevrones reinterpretados es una bocanada de estilismo de marca, que conectan con las LED diurnas en trazado de vanguardia. Sus faros en nichos cuadrafónicos hacen un ágil contraste con los antiniebla tensados enfosas contrastadas, mientras prominentes tomas de aire engrandecen su porte urbano. Sus retrovisores dialogan con la cromática del techo, en tanto que sus laterales dan cuerpo a un automóvil que transmite a la vez temperamento, modernidad y aventura.
Un énfasis dramático merecen sus potentes ‘elementos gráficos’ de inédita textura en la parte baja de las puertas, cual una escritura cuneiforme única en la industria, llamados ‘Airbump’, que protegen la carrocería con seis módulos de aire encapsulado, reforzando al mismo tiempo el estilo y la función.
Su visión de techo flotante, junto al extrovertido spoiler, conjuran una imagen fluida que aumenta el perfil deportivo del C3. La región posterior es otro momento innovador con geometrías en sintonía con las frontales, igualmente audaces.
El habitáculo del C3 respira innovación pura con su expresiva simetría y volúmenes bitono. Su naturaleza de acabados interiores acepta numerosas combinaciones cromáticas, guarniciones en tela o con TEP, con o sin costuras y toques metálicos.
Diseñado a base devanguardistas rectángulos de esquinas redondeadas bajo el espíritu “feel good” propio de la marca, el tablero rejuega con el vigoroso volante multifunción de enfoque desinhibido, acentuando ambos la percepción de anchura, para aportar al habitáculo un carácter más emotivo. Hay que destacar que la terminación de cada detalle es de impecable factura.
La patente amplitud del C3, diseñada en magnitudes de confort, hace olvidar su categoría compacta. El efecto de cápsula del C3 aísla a sus ocupantes del mundo exterior, facilitándoles el uso de las funciones sobre suintuitiva pantalla táctil capacitiva de 7 pulgadas, con el innovador sistema MirrorScreen, que gestiona el Bluetooth streaming audio y puertos USB; dicha pantalla proyecta la cámara de reversa.
Para una conducción más confortable y segura, el C3 incluye alerta de cambio involuntario de carril, así como monitoreo del punto ciego y alerta de presión de los neumáticos.
Sus asientos ofrecen placeres inmediatos al momento de sentarse, dado al concepto “Human” de Citroën, de elevados bienestares ergonométricos. Esta experiencia deriva del programa Citroën Advanced Comfort, que guió la concepción del C3, a base de revisar todos los códigos del confort sobre líneas de modernidad, para recrear el sentimiento: “como en casa”. Su maletero de 300 litros contradice la naturaleza compacta del C3.
El gesto propulsor del C3 lo aporta su motor PureTech 1.6 litros de última generación con 114 caballos de fuerza, asociados a una transmisión automática con Select Shift de 6 velocidades.
Así como los diseñadores de Citroën se esmeraron en ofrecer un producto de alto impacto visual, sus ingenieros se preocuparon por una conducción que le haga honor a esta nueva generación, de allí que el C3 tenga un desplazamiento placentero, con una respuesta adecuada a cada situación aun con todo el peso a “casa llena”, tal como lo disfruté con mi esposo y mis dos hijos, lo que me hace pensar que el C3 es perfecto para una familia corta o una pareja que gusta de mucho estilo en la jungla urbana.
Nacido con toda la prosapia ‘rompe-esquemas’ de Citroën, el C3 es un urbanocarismático, fuera del estándar, que desde su lanzamiento ha dado mucho de qué hablar. Esta propuesta al modo único de los chevrones franceses es continuidad del C4 Cactus, que ilustra la capacidad de Citroën para imponer ideas avanzadas e impactantes a la industria. Si el C3 es una chispa de originalidad, más lo es la cantidad de detalles que conforman su oferta, donde la aventura explicita y modernismo sin límites son dos de sus valores más emotivos, fraguando un auto nada compacto, único de Avant Auto.
