Un Porsche 911 GT3 sin alerón trasero fijo es lo que hace interesante al Touring Package. Pero un alerón que se despliega automáticamente se encarga de la fuerza aerodinámica a velocidades altas velocidades.
En su séptima edición, el Porsche 911 GT3 con Touring Package ofrece más de 500 caballos de potencia con la posibilidad de montar una transmisión manual de seis velocidades.
Es una súper poderosa mákina sin alarde. Las molduras de color plateado hechas de aluminio anodizado de alto brillo y el frontal pintado en el color de la carrocería le dan mayor discreción a la bestia que lleva dentro.
El emblema “GT3 Touring” que se encuentra sobre la parrilla del capó trasero es elemento distintivo. Como opción estas piezas pueden ir pintadas en negro satinado brillante, asi como los focos delanteros tintados en negro.
El interior es elegante y ofrece una configuración exclusiva para el GT3 con pack Touring y su tapizado negro en piel. El sentido de aire clásico del interior es lo predominante. Los asientos cuentan con costuras en ese mismo tono y en los reposacabezas se estampa el escudo de Porsche. Los protectores de los umbrales de las puertas y las molduras decorativas en todo tablero y de la consola central están hechos de aluminio negro texturizado.
Una variante de equipamiento del 911 Carrera RS de 1973 es lo que dio vida a la denominación “Touring”. Porsche volvió a ofrecer esta versión Touring en el 911 GT3 en 2017. Desde entonces, el concepto ha sido todo un éxito, llamando la atención de los usuarios de Porsche que no quieren llamar la atención.
También Porsche Design ofrece un reloj muy especial para los usuarios del Touring Package. Se trata de un cronógrafo con función flyback, con el diseño de los aros del vehículo en seis versiones de distintas configuraciones del 911. La esfera en sí presenta un acabado negro mate, mientras que las manecillas amarillas y luminosas combinan con el color del cuentarrevoluciones.
La correa del reloj está hecha la misma piel del interior e incluye el grabado “GT3”, además de una costura decorativa con el mismo hilo negro que se utiliza como elemento de contraste en el interior del vehículo. Es construido en la fábrica relojera suiza perteneciente a la compañía y es una pieza reservada exclusivamente a los propietarios del vehículo.
Porsche ha transferido la tecnología de competición a un modelo de producción en serie de manera más sistemática que nunca. La suspensión delantera independiente de doble horquilla y el impactante difusor trasero provienen del exitoso 911 RSR GT.
El motor 4.0 litros bóxer de seis cilindros es el mismo que utiliza el 911 GT3 R, ampliamente probado en carreras de resistencia, para brindando 503 hp.
Esta mákina pesa 1,418 kg con la caja de cambios manual y 1,435 kg con la transmisión PDK. Esto también es gracias al capó de plástico reforzado con fibra de carbono (CFRP), las ventanillas de cristal ligero, aros de aleación forjada y el liviano escape deportivo.