Un Chevy 1955 aparece en la pista preparada para tener un poco de diversión en el cuarto de milla, ya que a pesar de tenia sus poderes, el piloto aficionado sabía que no iba a ganar, pero rodar por la pista no es parte del plan, aunque desafortunadamente eso fue lo que ocurrió. Lo increíble es que durante las vueltas que provoco el accidente, el piloto sale a medio cuerpo por el parabrisas, vuelve a entrar y sale ileso por su puerta sin ayuda, viendo su destrozado Chevy