El Vuhl es una hipérbole del diseño aerodinámico made in Mexico, que se parece al tequila ya que prende de una vez. La mákina está construida con un chasis de panal aeroespacial de aluminio puro, por lo que es ligero y fuerte al mismo tiempo. Con sólo 1,532 libras, emplea una estructura delantera de tres etapas y las paredes laterales de doble capa para brindar una seguridad óptima, aunque la fiera carece de parabrisas.
El Vuhl despliega su coraje con su potente motor EcoBoost de cuatro cilindros y 285 caballos de fuerza, montado a la mitad, asociado a una caja de cambios manual de seis velocidades. Este biplaza es un cohete que hace el 0 a 100 en 3.5 segundos.
A pesar de ser legal en las calles, el vehículo fue claramente diseñado para la pista. Su bajo peso y alta relación de piñón y cremallera de dirección aseguran mantenerlo controlado y dócil en las curvas, mientras que la suspensión de doble horquilla ayuda a pegar sus cuatro ruedas sobre el suelo. El frenado es administrado por pinzas de aleación de cuatro pistones, que pican en rotores ventilados y perforados en cruz por todos lados.
La ‘pequeña mega-mákina’ se lanzó México, Oriente Medio, y el Reino Unido a un precio inconfesable, que incluye un cuerpo de plástico reforzado con fibra de vidrio. Opciones como una cámara integrada de alta definición, asientos de cubo de carbono con el ajuste de ante, un volante de liberación rápida, y un cuerpo de fibra de carbono full, que ahorra un adicional de 66 libras, están también disponibles.