El Repsol Rally Team, representado por Alejandro Cachón y Borja Rozada a bordo del Toyota GR Yaris Rally2, volvió a demostrar su temple competitivo al completar uno de los desafíos más exigentes del calendario: el Rally Italia-Sardegna. En una edición marcada por condiciones extremas y un terreno despiadado, el dúo español logró sobreponerse a un temprano contratiempo mecánico y finalizó la prueba con sensaciones alentadoras para lo que resta de la temporada en el WRC2.
La isla de Cerdeña, conocida por su belleza natural, se transformó en un escenario de supervivencia automovilística durante el pasado fin de semana. Las altas temperaturas y una superficie de tierra irregular llevaron al límite a pilotos, copilotos y máquinas. El número de incidentes y abandonos fue inusualmente alto, confirmando la rudeza del rally y haciendo aún más meritorio el desempeño de Cachón y Rozada.
El arranque del equipo Repsol-Toyota fue fulgurante. En el primer tramo cronometrado, Cachón impuso un ritmo imponente que le valió el mejor tiempo, marcando un hito personal: su primera victoria parcial sobre tierra en una cita del Mundial. Esa actuación inicial fue un claro mensaje de que el binomio estaba listo para pelear en la cima del WRC2.
Sin embargo, el deporte motor rara vez concede tregua. En el segundo tramo especial, una piedra traicionera en plena línea de carrera provocó serios daños en la suspensión del GR Yaris, forzando al equipo a retirarse prematuramente en la primera jornada. El incidente fue un duro golpe, especialmente tras un inicio tan prometedor, pero el equipo mantuvo la compostura y trabajó intensamente en la reparación del vehículo.
A partir de la segunda jornada, con la mákina en mejores condiciones, Cachón volvió a escena con determinación y constancia. Aunque ya sin aspiraciones de podio, se enfocaron en recuperar sensaciones, afinar el ritmo y sumar experiencia. El piloto asturiano logró tiempos competitivos y un rendimiento progresivo, reflejo de una estrategia madura y enfocada en el largo plazo.
Finalmente, la pareja cerró el rally en la posición 14 del WRC2, un resultado que, aunque modesto en términos de clasificación, representa un triunfo desde la perspectiva de resiliencia, desarrollo técnico y preparación para lo que viene. Con el respaldo de Repsol, el equipo valora muy positivamente lo aprendido y se declara listo para encarar el próximo gran reto: el exigente Rally de Grecia, que se celebrará a partir del 27 de junio.
Más allá del resultado, lo ocurrido en Cerdeña refuerza una convicción: la alianza Repsol-Toyota tiene el carácter necesario para enfrentar los desafíos más duros del mundial de rally. Cachón y Rozada han demostrado que pueden transformar los obstáculos en oportunidades, y que cada kilómetro recorrido, incluso los más accidentados, los acerca un poco más al podio que buscan.