La marca que ostenta del logo más antiguo de la industria automotriz, representada por un león desde el año 1850… obviamente es PEUGEOT.
Como parte del sector metalúrgico a mediados del siglo XIX, cada año PEUGEOT añadían nuevos productos en las diferentes divisiones de la marca. En esta primera fase de PEUGEOT como sociedad anónima, la producción se concentró en las tres líneas principales de desarrollo desde la fundación de la matriz PEUGEOT Fréres: sierras, cuchillas y herramientas.
Dentro de estos tres hilos se encontraban una amplia gama de objetos que se siguen produciendo hasta nuestros días: desde un simple producto terminado de fundición hasta una herramienta completa con mangos de madera (o eléctrica sin cables, como es la tendencia actual).
El orfebre Justin Blazer fue encargado del diseño de un logotipo que unificase todas las divisiones de PEUGEOT. Aunque no fuese la tarea específica de un orfebre, la necesidad de que dicho logotipo apareciese en uno de los productos PEUGEOT de esa época, eminentemente siderúrgicos, hizo de esta necesidad el requisito imprescindible para encargar a este artesano tan importante labor.
Tras varios procesos anteriores, el símbolo del león aparecería por primera vez en 1847, pero no se aplicaría hasta tres años más tarde, en la hoja de una sierra PEUGEOT. De hecho, existe una sutil similitud entre el animal, las cualidades del animal y la herramienta: el león fue elegido porque representaba las tres características principales de los productos fabricados por PEUGEOT, es decir, la flexibilidad de la columna vertebral del león, que se compara con la de la cuchilla; la velocidad de esta última en el corte se asimila al golpe del animal; y los dientes afilados representan la resistencia de los productos.
La intención que se quería transmitir con este logo era crear una marca que certificase su producción y, al mismo tiempo, permitiese ser identificada por esa parte de la población que aún no sabía leer y escribir.
En 1872 aparece en todas las herramientas de PEUGEOT y, posteriormente, se va implantando en otros productos de la marca como molinillos (1881), bicicletas (1882) y motos (1898). Curiosamente el primer automóvil fabricado por PEUGEOT, el Type 2 (1889), no lució el león en su frontal.
Se tuvo que esperar hasta 1905 para ver esta circunstancia, utilizando un logotipo del león sobre una flecha. En 1923, los escultores Marx y Baudichon dieron un paso más. Siguiendo los patrones artísticos de la época, el león pasó a ser tridimensional y funcionaba como tapón para el radiador de los PEUGEOT, con dos versiones: el león dispuesto a saltar, y el león rugiendo.