Fiat se estaría desprendiendo de Ferrari a finales de este año, perdiendo su principal marca de lujo. El director ejecutivo Sergio Marchionne necesitaría urgentemente a Maserati para llenar ese vacío.
El poder, el prestigio y beneficios de Ferrari han contribuido a financiar proyectos para Jeeps, Fiat y Chrysler que son los que aportan más ingresos a la marca. Se entiende que Maserati puede desempeñar un papel similar, dice Marchionne si se le suma una SUV y un coupé a la línea de modelos y la apertura de los concesionarios estadounidenses felpa de Westport, Connecticut, a San José, California.
«Maserati es muy importante«, dijo Marchionne en una entrevista. Después de la escisión de Ferrari, «se convierte en el Maserati, exclusiva marca más codiciada que tenemos.»