El rugido eléctrico del Taycan Turbo GT rompió el silencio de Interlagos, dejando una marca imborrable en la historia del automovilismo. Al mando, Felipe Nasr, tricampeón del IMSA y tres veces ganador de las 24 Horas de Daytona, llevó al deportivo eléctrico de Porsche a una hazaña sin precedentes: 1:42,1 minutos en el desafiante trazado brasileño de 4,3 kilómetros. No solo pulverizó el récord del Taycan Turbo S de 2022 por casi ocho segundos, sino que también destronó al 911 Turbo S, superándolo por más de un segundo y estableciendo un nuevo referente para los autos de producción.
Interlagos, un circuito de contrastes donde las curvas técnicas se entrelazan con vertiginosas rectas y cambios de elevación, se convirtió en el escenario perfecto para la demostración de poder del Taycan Turbo GT. «Sabía que su aceleración sería brutal, pero lo que realmente me impresionó fue su equilibrio general», confesó Nasr. Al activar el Modo Ataque, el vehículo alcanzó los 272 km/h justo antes de la icónica Curva do Café. En la salida de la Curva do Sol, el velocímetro ya marcaba más de 200 km/h. «La dirección es precisa, el agarre absoluto y la estabilidad, incluso en frenadas extremas, es sencillamente asombrosa», añadió el piloto del equipo Porsche Penske Motorsport.
Para Porsche Brasil, este récord no es solo un trofeo, sino una declaración de intenciones. «Queríamos mostrar el potencial del Taycan Turbo GT en su debut en el mercado brasileño, y lo logramos con creces», afirmó Peter Vogel, CEO de la marca en el país.
El Taycan Turbo GT no solo reina en los circuitos, sino que también es el automóvil de seguridad más potente en un campeonato mundial de la FIA. Desde mayo de 2024, ha reemplazado al Taycan Turbo S en la Fórmula E, asegurando la competición al más alto nivel con dos unidades en cada carrera: una con el paquete Weissach y otra sin él.
La hazaña de São Paulo es solo la más reciente en una serie de récords que el Taycan Turbo GT ha conquistado alrededor del mundo. En Shanghái, marcó un tiempo de 2:11,28 minutos, el primer récord oficial del circuito. En Laguna Seca, California, con Lars Kern al volante, estableció la vuelta más rápida jamás registrada por un auto eléctrico homologado para la calle: 1:27,87 minutos. Y en Nürburgring, la legendaria pista que desafía a los mejores del mundo, el Taycan Turbo GT fulminó su propia marca con un tiempo de 7:07,55 minutos, 26 segundos más rápido que el récord previo.