La alta velocidad se alcanza con mucho coraje y se mide con electrónica de punta, dando a la competencia una emoción a escalas imprevisibles, lo decimos por los 0.142 segundos que separan a Toyota de Audi, francamente una diferencia sólo captable por equipos muy sofisticados. De este modo, Toyota Racing, líder de Le Man Series, se fue ‘alante en los primeros testajes de las 24 horas de Le Mans 2014, estableciendo las dos primeras vueltas rápidas ayer en el día oficial de pruebas. El TS040 Hybrid Nº 8 de Sébastien Buemi registró una vuelta de 3m23.014 en la segunda de las dos sesiones de pruebas de 4 horas, 0,7 segundos más rápid
o que el tiempo más rápido en la mañana fijado por el Audi R18 e-tron quattro Nº 3. El tiempo de Buemi fue sólo 0,142s más rápido que el Toyota Nº 7 de Kazuki Nakajima.
El Audi Nº 3 terminó el día con el tercer tiempo más rápido gracias al 3m23.799 de la mañana, con Marco Bonanomi marcando una vuelta de 3m24.453 en la segunda sesión, exactamente el mismo tiempo que su compañero Loïc Duval en Audi Nº 1. Los dos Porsches LMP1-H se vieron divididos por el Audi Nº 2 de André Lotterer, sólo 0.065s por detrás del 919 Hybrid Nº 14 de Neel Jani, quien registró una vuelta de 3m24.692. Jani fue 0,2 s más rápido que su compañero de equipo Timo Bernard en el Porsche Nº 20. El Rebelion R-One Nº 20 de la clase LMP1-L terminó con 1,3 segundos de ventaja sobre el R-One Nº 13 al final de la jornada, con Mathias Beche marcando una vuelta 3m31.700, 8.6s detrás del Toyota líder en el circuito de Le Mans de 13,629 kilómetros de largo.