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Con Roseberg por arriba de Hamilton, Austria fue otro plato fuerte para la escudería Mercedes. Si bien el piloto británico comenzó la carrera de Spielberg del domingo desde la pole position, fue su compañero alemán, Nico Roseberg quien pasó al frente luego de la cuerva 1. A partir de ahí nunca miró hacia atrás, consiguiendo su tercera victoria de la temporada para reducir la ventaja del título de Hamilton a sólo 10 puntos. ¿Celos en lo alto del podio? Frente a los flashes de las cámaras, eso no se puede saber. Lo único cierto es que Nico no se cambia por nadie.
El campeón del mundo, también en desventaja por una penalización de tiempo de 5 segundos, para cruzar la línea blanca en la salida de boxes, tomó la bandera 3.8 segundos detrás de Rosberg, mientras que Felipe Massa marcó su primer y segundo podio de Williams de la temporada en tercera.
Con Hamilton lento de la línea, Rosberg le arrebató una ventaja que sólo se rindió brevemente durante las paradas en boxes individuales, y se controló la carrera con facilidad a pesar de las preocupaciones acerca de finales de los años una grave vibración neumático delantero. Hamilton empujó duro, pero incluso su pena no hizo ninguna diferencia en el resultado; este fue un día en que nadie podía vivir con Roseberg.
Tampoco nadie puede sostener una vela a la Mercedes. Sebastian Vettel hizo todo lo posible, pero perdió el tercer puesto cuando parada en boxes de Ferrari se retrasó como la rueda trasera derecha tomó más tiempo para cambiar. Eso fue suficiente para dejarlo caer detrás de Williams de Massa, y su persecución después de que el brasileño fue uno de los aspectos más destacados de la carrera. Durante las últimas vueltas estaba a corta distancia, pero Massa se mantuvo para su primer podio desde Abu Dhabi el año pasado.
Ferrari perdió su otro bólido en un violento accidente en la primera vuelta, que sacó al auto de seguridad hasta la séptima vuelta. Como Kimi Raikkonen consiguió salir de la curva 2 patinado de las ruedas, el Ferrari entró en contacto con el McLaren de Fernando Alonso. Tanto golpeó la pared exterior y el McLaren montado el Ferrari y fue arrastrado a lo largo de la cima de la bañera – sólo pulgadas de la cabeza de Raikkonen – hasta que se agotó su impulso. Se veía mal, pero ninguno de los pilotos se hizo daño.
