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Sebastian Vetel está que no se apea de los periódicos. Todo lo que hace o estás por hacer es noticia, ya que el cuatro veces campeón mundial de la Fórmula Uno buscará cerrar una impactante temporada 2013 con una victoria en los Estados Unidos. Esa la fresa de su pastel que le falta para culminar un año de realizaciones.
La primera y última vuelta en el totalmente nuevo Circuito de las Américas, cerca de Austin, fue en 2012, fue casi la tormenta perfecta para Sebastian Vettel de Infiniti Red Bull Racing. El alemán tomó la posición pole y estableció la vuelta más rápida (1:39.347), pero fue vencido por Lewis Hamilton por tan solo medio segundo.
El llamado súper recinto alberga pistas para diferentes gustos que se mezclan en este vasto estado americano. En su corazón se encuentra el circuito de Fórmula Uno y 120,000 fans apasionados que llenarán las gradas este fin de semana para observar a los más rápidos autos y conductores del planeta.
Desde la línea de inicio, los vehículos explotan por la recta y entran a una curva izquierda, entonces comienza la diversión con las curvas. Las vueltas desde la 2 a la 7 comienzan muy rápido y son suavemente estrechas antes de una fuerte parada en la vuelta 8. En un automóvil de Fórmula Uno, estas curvas fluidas traerán varias sonrisas. La vuelta 9 es estrecha también y después se abre hacia la vuelta 10 antes de que haya otra fase de frenado para una vuelta a la izquierda en la 11. Y entonces es el momento de relajarse.
La “recta trasera” es una de las más largas del año de carreras, y hay una zona de DRS justo después de la mitad. La vuelta 12 es una curva cerrada a la izquierda y, con los vehículos en la velocidad máxima antes del frenado, cualquier error del conductor podría ser castigado con una maniobra de rebase.
