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El submarino sin tripulantes es un desafío con un mar de posibilidades, que harán la exploración submarina más rentable y mucho menos peligrosa. La respuesta es que el submarino autónomo ya está en proceso, con el llamado «Echo Buscador» de 32 pies de largo, Echo Seeker es el hermano más joven del más grande sub autónoma Echo, guarda bosques originales de Boeing, construida en la década de 2000.
La nueva mákina no sólo añade tamaño a la ecuación, sino que aumenta la capacidad de carga a 6,000 libras. El vehículo puede sumergirse a profundidades de 20,000 pies durante tres días seguidos, y opera completamente en su propio tiempo sumergida. No hay ninguna atadura a una nave nodriza o comunicación de línea de visión que se ve aquí. Es realmente por su propia cuenta.
El Buscador Echo puede mantener resoplando de hasta 265 millas sin recargar. Si algo sale mal, cuenta con sistemas auxiliares y de copia de seguridad, que permiten al Echo Buscador resurgir de forma segura.
Además, el sub también puede echar el ancla en el fondo del océano y entrar en el modo de baja potencia, no es posible, en el caso de la recuperación inmediata , que es un poco espeluznante. ¿Qué hace un sub autónoma pensar en el fondo del océano?
Como referencia en al próximo vídeo, Solicitantes Echo podrían ponerse a la venta a los clientes comerciales y militares por igual. Espere más variantes a seguir también. Lanza Torres, director de Programas de Tecnología Avanzada de Boeing, señala que una mejor tecnología permitirá a las generaciones futuras para capacidad aún más bajo el agua, la duración más largos de la misión, las cargas útiles más grandes, y mayores niveles de autonomía.
