Sobre un planteamiento escenográfico de 35,000 pies cuadrados, el Stand Toyota aglutinó numerosos espacios estelares para hacer lucir sus casi 40 propuestas de vehículos presentes y futuros, ya sea de producción o de avezado concepto. Su sofisticada tecnología de peso específico mostró el rumbo de la marca a la conquista de una movilidad futuro sin parangones, plena de liderazgo. Sus avances son una ola creciente de nuevas ideas de cómo las personas pueden transportarse en el largo plazo, con la mirada bien puesta en la limpieza planetaria y una revolucionaria gestión de la seguridad con profundo sentido humano.
La perspicaz conectividad presentada por Toyota representa un impresionante salto en la gestión de manejo, dada su actualización de datos de los mapas en 3D, su imponente avances en software, diversas opciones inéditas de información y entretenimiento, sus contribuciones hacia una banda ancha de cobertura global de nuevo cuño, capaz de transmitir grandes cantidades de datos, así como la capacidad de compartir todo el potencial de las comunicaciones por satélite, en sociedad con la tecnología de antenas planas de la corporación Kimeta, mediante una importante inversión en join venture de US$5 millones en investigación y desarrollo tecnológico.
Tras deslumbrar al CES con sus aportes en robótica y la comercialización de su sistema telemático SmartDeviceLink, Toyota golpea en Detroit con su visión del auto hiper-conectado, proclamada por sus CEOS presentes en Cobo Hall “como la verdadera movilidad del futuro”.
A base de refulgentes recursos multimedia Toyota hechizó a su audiencia por la forma tan asidua con que la marca hizo la tarea en el pupitre del mañana.
Luego del lanzamiento del Mirai eléctrico de pila de combustible impulsado por hidrógeno que comenzó las ventas en California hace un año, Toyota irrumpió más ambiciosamente en Detroit con su concept FCV+, donde el hidrógeno surge como único protagonista bajo el capó con una sorprendente nueva habilidad: su capacidad de generar electricidad directamente del hidrógeno y almacenarla como una fuente estable de energía eléctrica para uso múltiple: en el auto, la casa o en viajes.
De visión innovadora presente en el NAIAS 2016, Toyota Kikai Concept rompe moldes por ser una mákina “cero referencias”. En la vitrina Toyota lució también el Toyota i-ROAD, un eléctrico personal y divertido de conducir, equipado con la revolucionaria tecnología de Active Lean, que imita al esquiador en sus desplazamientos, ágil como motocicleta y cómodo como un auto. Así mismo hizo gala del Toyota FV2, capaz de conectarse con otros vehículos para alcanzar la conducción súper segura. Su otra novedad es que es operado por el conductor desplazando su cuerpo para moverse intuitivamente a cualquier dirección.
Dejamos una tinta de afecto al habernos encontrado con nuestro amigo el nuevo RAV4, que ya se encuentra en Delta Comercial.