Aunque nos parezca un tanto lento, la venta de vehículos eléctricos esta en avance, cada vez hay más enchufables a nuestro alrededor, por tanto uno de los detalles importantes que debemos saber es los diferentes tipos de enchufes para recargar un auto eléctrico.
Un vehículo eléctrico o un híbrido enchufable, admite diferentes tipos de carga, que esta sea lenta, rápida o ultrarrápida depende del tipo de cargador y cada uno emplea un conector diferente.
Tipos de enchufes para la recarga de vehículos eléctricos
A día de hoy son tres los tipos de conectores más empleados en Europa. Dependiendo el que utilices será el tiempo de carga, de menos a más son CCS 2, Mennekes y Schuko.
CCS 2 son las siglas de Combined Charging System.
Este es el conector estándar en Europa para la recarga rápida. También se conoce como Combo porque, en realidad, es una ampliación del Mennekes que suma dos bornes en la parte inferior. Por la parte superior (los 5 bornes), pasa la corriente alterna, mientras que por los dos inferiores fluye la corriente continua que va directa a la batería cuando se utiliza un cargador rápido o ultrarrápido.
Mennekes o Tipo 2
El Mennekes o Tipo 2 es el conector más utilizado en Europa. Se reconoce porque tiene siete bornes, repartidos en posición 2+3+2. Los conectores Mennekes admiten recargas monofásicas y/o trifásicas. La diferencia entre ambas es el tiempo de recarga. La corriente monofásica es la habitual en las viviendas y, por tanto, la más empleada en recargas domésticas; tiene una sola fase y una única corriente alterna. La corriente trifásica permite una recarga más rápida porque tiene tres fases y tres corrientes alternas.
Schuko o cómo cargar en el enchufe de casa
Existe otra opción para la recarga doméstica de los vehículos eléctricos que no requiere la inversión que supone la compra de un punto de carga: cargar la batería en un enchufe convencional o casero.
Los enchufes donde conectamos la televisión, el microondas… se denominan Schuko y permiten llevar a cabo el proceso de carga pero con una duración mucho mayor. Para que tengas una idea más clara, la batería de un Tesla Model 3 conectada a un enchufe convencional solo recupera 18 km por cada hora de carga.
El enchufe Schuko tiene dos bornes. Para poder utilizarlo como punto de recarga es necesario un cable especial con dos bornes en un extremo y cinco (Mennekes) en el otro que es el que engancharemos al auto eléctrico. Es el modo de carga que se emplea para baterías de pequeño tamaño como las bicicletas o los cuadriciclos eléctricos.
Conectores empleados fuera de Europa
Los primeros autos eléctricos que se pusieron a la venta en Europa, como el Nissan Leaf de primera generación o los Peugeot Ion, Citroën C-Zero o Mitusibishi i-MIEV empleaban el conector de Tipo 1, también conocido como CHAdeMO. Este es el estándar japonés para la recarga en corriente continua de vehículos eléctricos, y admite hasta 200 amperios.
Para la recarga lenta con corriente alterna fuera de Europa se utiliza el conector Yazaki. De cinco bornes, a simple vista se diferencia del Mennekes porque es más pequeño (mide 43 mm de diámetro). Además existe el Scame, que solo se utiliza en Francia y actualmente está descontinuado; permite realizar una carga semirápida con 32 amperios.
Cómo saber si un punto de carga es compatible con tu vehículo
El truco más sencillo para saber si puedes usar el cargador del centro comercial o el restaurante para recuperar la autonomía de tu vehículo está en contar los bornes; también puedes prestar atención al etiquetado.
Desde marzo de 2021, por orden de la Unión Europea (UE) todos los enchufables deben salir de fábrica con una pegatina (lámina de papel) que muestra de forma clara y sencilla con qué cargadores es compatible. Este sistema de identificación emplea un código de colores y letras. La pegatina es diferente si se coloca en el auto o en el punto de recarga: símbolo en color blanco/plateado sobre fondo negro para las pegatinas de los vehículos y símbolo negro sobre fondo blanco/plateado y línea exterior negra para los cargadores.
Los símbolos son letras enmarcadas en un rombo; para la corriente alterna se utilizan las letras B, C, D y E tal y como muestra esta tabla:
Para los cargadores en corriente continua y los coches eléctricos que la admiten las letras empleadas son K, L, M, N y O:
El uso de este etiquetado es obligatorio en turismos, furgonetas, camiones, autobuses, autocares, ciclomotores, motocicletas y cuadriciclos eléctricos en los 27 estados miembros de la UE. En los vehículos la pegatina se debe colocar cerca de la toma de carga; también en los cables de carga y en el manual del propietario.
En las estaciones de recarga de uso público la pegatina tiene que ir colocada junto a la toma de corriente; si se trata de una estación con varios cargadores habrá una pegatina por punto. Los puntos de carga de uso particular no tienen que estar etiquetados.