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Desde hace muchos años los túneles de viento se han utilizado para diseñar y probar vehículos aerodinámicos y energéticamente eficientes. Ford ha combinado la última tecnología de túnel de viento con el equivalente a una cinta de correr del tamaño de un vehículo para ayudar a crear su próxima generación de vehículos de producción, incluido el nuevo Mustang Dark Horse.
El Rolling Road Wind Tunnel (RRWT) es capaz de simular velocidades del viento y de la superficie de la carretera de 200 mph, y se utiliza para respaldar las pruebas de vehículos eficientes y basados en el rendimiento en toda la línea Ford, incluida la próxima generación de vehículos Ford eléctricos, híbridos y de gasolina.
“La cantidad de aire movida por nuestro túnel de viento es suficiente para llenar un dirigible K-Class en poco más de 5 segundos”, comentó John Toth, supervisor de ingeniería de túneles de viento de América del Norte.
La gran clave del RRWT es que brinda datos más precisos en términos de resistencia aerodinámica y carga aerodinámica en comparación con otros diseños de túneles de viento anteriores, que son factores clave al optimizar el alcance y la eficiencia. También permite más pruebas internas que simulan condiciones de carretera abierta, lo que puede ayudar a reducir los costos de diseño y al mismo tiempo acelerar el proceso de diseño.
“Cuanto más nos acerquemos a la realidad en el laboratorio, mejor y más rápido podremos crear vehículos más eficientes energéticamente con una gran estabilidad en la carretera y en la pista”, expresó Toth. “Probar mientras las ruedas y los neumáticos se mueven es fundamental para mejorar la aerodinámica de los vehículos listos para la pista, como el Mustang Dark Horse, que tiene que equilibrar tanto la resistencia aerodinámica como la carga aerodinámica”.
Un nuevo sistema de camino rodante de cinco cinturones puede replicar la resistencia del mundo real a través de un túnel aerodinámico de camino rodante que permite a Ford acercar el camino al vehículo, en lugar del vehículo a la carretera.
Para probar el rendimiento aerodinámico óptimo, cada rueda tiene su propio cinturón, formando los primeros cuatro cinturones. Un gran quinto cinturón pasa por debajo del centro del vehículo. Se utiliza una grúa para cambiar entre los sistemas de cinco correas y una sola correa, un plug-and-play de tamaño industrial. El cinturón único, que opera a una velocidad de hasta 200 mph, abre una nueva generación de pruebas para vehículos de rendimiento de alta velocidad.
Maximizando la carga aerodinámica en el Mustang Dark Horse
El Mustang Dark Horse es uno de los primeros de muchos vehículos que será probado en este túnel de viento. La aerodinámica a medida es un paso clave en el desarrollo de nuevos vehículos.
Para vehículos de pasajeros y camiones, el objetivo es lograr una baja resistencia al avance, creando un vehículo más eficiente. Sin embargo, para vehículos como el Mustang Dark Horse que priorizan el rendimiento listo para la pista, los aerodinámicos cambiarán la baja resistencia por una mayor carga aerodinámica, lo que ayuda a los autos a adherirse a la carretera o la pista y mejora la sensación de manejo en las curvas.
El Mustang Dark Horse viene con una aleta Gurney disponible, que es una placa adicional unida al alerón trasero para ayudar a generar carga aerodinámica adicional, así como tres placas verticales que salen de la parte inferior de la carrocería cerca de cada rueda delantera llamadas tracas. Las tracas ayudan a interrumpir el flujo de aire generando una mayor carga aerodinámica en la parte inferior del vehículo, lo que puede ayudar a que el automóvil se adhiera mejor a las curvas a velocidades más altas.
