Land Rover lleva al extremo el desafío para sus vehículos, al punto de ir al mismo círculo polar ártico con su híbrido Range Rover Sport, llevando detrás su leal compañero de nombre Airstream… un avanzado mega-remolque, cuya odisea fue salpicada por una estremecedora, fantasmagórica y natural proyección de auroras boreales.
El Airstream 684, de 5,500 libras viene siendo remolcado desde Mengerskirchen, Alemania, para remontar 2,500 millas al norte congelado, a través de instalaciones de pruebas de invierno de Land Rover en Arjeplog, en Suecia. Según Land Rover, el reto ha sido enfrentar uno de los peores inviernos en Escandinavia, con profundidades récord de nieve, vendavales y condiciones del hielo insufribles, por lo que no es de extrañar que esta inhóspita parte del mundo haya sido escenario de tantos conductores campeones de rally.
Pese a las adversidades climáticas, la tripulación de este Land Rover contó con un refugio cómodo ante cualquier tormenta, ya que el Airstream viene con dos camas dobles, televisión por satélite, y una cocina totalmente equipada, como todo hogar dulce hogar… o casi.
Todo ese lujo pesa más de dos toneladas, pero el híbrido Range Rover Sport lo arrastra por colinas nevadas y por caminos de tierra con su motor de 3.0 litros V6 turbodiesel, caja de cambios automática de ocho velocidades y un poderoso motor eléctrico a la altura de las circunstancias. Su producción combinada tiene una potencia de 336 caballos de fuerza y 516 libras-pie de torque, y Land Rover dice que el híbrido Range Rover Sport hace el 0 a 60 mph en menos de siete segundos, claro cuando no está tirando del remolque.